La tibieza de Alemania ante Rusia, la inexistencia de un discurso unificado y su negativa a enviar armas defensivas a Kiev han provocado una crisis de la imagen internacional del país en su papel en la crisis de Ucrania. El liderazgo del Gobierno de coalición del socialdemócrata Olaf Scholz, que aún no ha cumplido dos meses, está en entredicho después de la avalancha de críticas de observadores políticos tanto en Estados Unidos como en otros países, especialmente en Europa del Este. La incredulidad respecto a la actuación de Berlín ha dado paso incluso a las burlas mientras crece la desconfianza. “¿Es Alemania un aliado fiable de América?”, se preguntaba el experto en seguridad Tom Rogan en The Wall Street Journal hace unos días. “Nein”, respondía.
Scholz hablará este lunes con Biden de su negativa a enviar armas a Ucrania. La dependencia energética y el legado histórico protagonizan las complicadas relaciones entre Berlín y MoscúRead More
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